Bye, bye glamour...

Durante los últimos meses de embarazo tuve los típicos problemillas colaterales de un maxibombo en verano: sofocos, tobillos y pies hinchados, el anillo de casada se vio relegado a un joyerito porque tenía riesgo de estallar, las ganitas de hacer pis a todas horas me mantenían bastante entretenida y acomodar el barrigón en la cama y dormir "algo" era ciencia ficción... Pero aún sintiéndome una ballena varada, me veía guapísima!!! Imaginaba que la felicidad era la clave, pero he descubierto que NO. Soy la mujer más feliz de este mundo desde que nació mi peloncete y no me había visto más fea en mi vida!! El embarazo saca lo mejor de nosotras, pero el después... Uffff!!! Lo de los kilos extra post parto es algo con lo que tu mente ya cuenta, pero a eso se le une la cara de zombie, las ojeras, el no tener tiempo ni para mirarte en el espejo durante las primeras semanas, el agotamiento crónico que te impide sujetar la pinza y depilarte las cejas! Encima tu melenón a lo Pantene del embarazo deja paso a un 'pelopobre' sin brillo, que irás viendo día tras día como se cansa de ti y se inmola en la almohada. Y encima si eres de las Makeup adict, de las del potingueo al por mayor, de las que se pinta las uñas a juego con la blusa... Sufrirás!!! Tu tiempo ya no es tuyo!!! Si eres una Diosa griega y no necesitabas currarte tu estilismo estás de enhorabuena, pero para las pequeñas mortales como yo que teníamos en el colorete, el peeling y la plancha del pelo invertidas las acciones, el mundo del glamour se ha acabado!!! Me encantaría terminar el post dando un truco infalible y espectacular de superwoman... Cuando lo encuentre lo haré. Estoy en su busca, lo prometo, he empezado por volver a ir a la peluquería, por intentar al menos una vez en semana ducharme sin prisas, por aprovechar alguna siesta del peque para una buena "chapa y pintura"... Poquito a poco me reencontraré de nuevo, mientras tanto... I'll survive!

Feliz Navidad!

Hace un año que nos enteramos de que estaba embarazada y si ya las Navidades pasadas fueron especiales, os imaginaréis cómo serán éstas...
Mi marido y yo siempre habíamos puesto el árbol juntos, nos encanta, porque en el primer viaje que hicimos cogimos la tradición de comprar un adorno para nuestro árbol, y ponerlo implica recordar momentos preciosos que hemos vivido. Así que aunque no sea el más coordinado, porque cada bola es de una punta del mundo, para nosotros es el más bonito que hay.
Este año yo le iba dando los adornos para que él los colgara mientras le daba el pecho al peloncete... Si existe la felicidad completa debe ser lo más parecido a eso, os lo aseguro.
Os deseo desde aquí unas felices fiestas y que el año 2013 esté lleno de momentos maravillosos. Un abrazo enorme!

Su primer viaje en avión

Siempre nos ha encantado viajar, es nuestro mayor vicio y teníamos claro que cuando tuviéramos un hijo (a pesar de lo que tantos agoreros nos decían...) haríamos lo posible por seguir haciéndolo. La principal diferencia reside en que el ritmo del viaje lo marca el niño, respetar sus necesidades y su confort. Por lo demás todo puede seguir siendo sencillo y placentero, aunque lleves sobrecarga de equipaje ;)

Hay bastante desinformación sobre los viajes en avión con los bebés, incluso información contradictoria... Los típicos foros de mamás es mejor no pisarlos, porque sales más liada que entraste... Cuánta falta me hubiera hecho encontrar un post que explicara con pelos y señales lo que yo os voy a contar!

Os recomiendo empezar a hacer las maletas, o por lo menos hacerte una lista, un par de días antes. Especialmente la del niño, porque al final los papis nos conformaremos con el hueco que él nos deje! (Sí, todo cambia, yo he sido de las de zapatos y bolso diarios y aquí me tenéis. La moda de no llevarlos coordinados se la inventó una mamá reciente, of course...).

Es importante planificar con cabeza el equipaje de mano y si vais a facturar alguna maleta, ya que hay q contar con que podáis tener manos para todo, carrito y niño incluidos! Porque hay zonas en las que deberás o 'te obligará' a cogerle. (Las que tengáis portabebés puede resultar útil llevarlo colocado).

Para que os hagáis una idea, nosotros llevamos para 10 días una trolley grande (que facturamos), dos mini-trolleis q 'se supone' que eran nuestro equipaje de mano, el bolso de paseo del bebé y su carrito.

Debéis consultar la normativa de la compañía con la que voléis con respecto a los bebés, pero lo habitual es que el niño, aunque viaje sin asiento propio (va encima de uno de los dos), tenga derecho a llevar 2 bultos de equipaje de mano, por ejemplo la silla y su bolsa, como fue nuestro caso, pero puede variar, cuna de viaje, maxicosi, etc...

Para estos bultos son mucho más permisivos, ya que se trata de cosas que garantizan el confort y buen cuidado de un bebé y con eso poquitos se atreverán a meterse.

Resumiendo, llevamos la maleta grande con la ropa de mi marido y mía y semivacía para dejar hueco para compritas... Una de las trolleis con la ropa del niño y otra con ordenador+cámaras+navegador en una zona y en la otra los bártulos del peque: esterilizador+ calienta biberones + una lata entera de leche en polvo de su marca habitual, ya que no conviene cambiarle de marca en pleno viaje para evitar contratiempos digestivos y fastidiar la salida... Y una muda para nosotros por si se pierde la maleta o hay algún problema de manchas ( vómitos, pises... Las mamás ya me entendéis!).

Una vez facturas, llega la juerga, hay que pasar por los arcos! Y si ya de por sí es un trámite que no suele gustar mucho, con un bebé y la primera vez... Menos!! Te dejarán pasarlo todo??

Lo único bueno de ir con un carrito es que te acortan el camino facilitando el acceso. Atentos a este tipo de señalización:

En las maletas de mano ya sabéis q no se pueden meter envases de líquidos con más se 100 ml, pero esto no se tiene en cuenta con los bebés. En su bolsa de paseo yo llevaba, 3 biberones sólo con agua, un biberón de infusión Blevit Sueño y una mini botella de 150 ml de Fontvella precintada sin abrir. No tuve ningún problema. Llevé una bolsa de las de congelación grande para meter todos los bibes y la botellita, sobre todo porque las bandejas donde se deja todo son asquerosas, la gente mete hasta las botas... Así q hay que extremar la higiene con todo lo del bebé. En otra bolsita metí los tarritos cosméticos, cremita facial, bálsamo pañal, colonia, gel, etc... Todo de menos de 100 ml, eso si. Con las papillas y la leche en polvo si que no tienen ninguna restricción de cantidad.

Además de todo esto hay que plegar la silla del niño! Eso significa 'pasas el arco sola, pitas, te quitas las botas, el niño llora, te ve agobiada, llora más, lo coges, el papá pliega la silla, tú descalza con el niño en un brazo haces malabarismos para que el saco y el abrigo del bebé, con los que tiene que pasar diez días, no rocen con la bandeja guarreada que te ofrece 'amablemente' el guardia de turno...'. En fin, que es importante que llevéis todo lo mas cómodo y organizado posible para evitar empezar las vacaciones con estreses!

También hay que tener suerte con la reacción de los peques ante el sarao... El nuestro suele disfrutar bastante cuando nos ve a su papá y a mi moviéndonos como en los Comedy Capers, así que se limitó a observar, muy en su sitio el tío, controlando que todo quedara a su gusto...

Nada más salir del control de seguridad en la T1 del Aeropuerto de Madrid-Barajas te encuentras con esto:

Por si preferís quitaros un bulto,facturar la silla desde el principio y pasar por el control con el bebé en brazos o en el portabebes y luego hacer uso de este tipo de sillas hasta subir al avión.

Otra opción si sois padres muy viajones es haceros con una sillita de bebé como la nuestra. Yo ya estaba encantada con ella, pero desde este viaje más. Cumple con la normativa de equipajes de mano y no es necesario que la lleven en bodega, esto implica poder disponer de ella nada más salir del avión.

Os dejo el enlace por sí os interesa.

http://www.babyemporium.com/yoyo.es/caracteristicas.html

Otro punto positivo es que los viajeros con niños menores de 5 años tienen prioridad de embarque y pasan justo después de los de clase preferente o 'speedy boarding', con lo que no hay q aguantar pesadas colas que cansen al bebé y podréis acomodaros más tranquilamente.

Nada más subir al avión te dan un cinturón para el bebé que tienes q enganchar al tuyo y deberás llevarlo obligatoriamente el tiempo que ellos te marquen, como en todos los vuelos.

Como único consejo a tener en cuenta en el avión es que conviene que el niño succione en el despegue y aterrizaje para evitar las molestias del cambio de presión. Meterle el pecho, el biberón o un chupete ayudará a que esté tranquilo. Como curiosidad os diré que en la web de algunas compañías aéreas indican que está permitido dar el pecho a bordo, excepto durante el despegue y el aterrizaje. Yo hice caso omiso porque mi hijo se suele relajar mucho más con la teta que con el bibe y creo que mientras no le quites el cinturón para hacerlo no te ponen ningún problema, porque yo no lo tuve.

El resto del vuelo puede ser fantástico, bueno, regular, malo o dramático, depende del día que tenga vuestro pequeño, igual que cuando están en casa! Son bebés! Y no son programables!! Yo intenté que tuviera un poco de hambre y sueñito, jugando con él el tiempo que estuvimos en el aeropuerto, manteniéndolo despierto, y salió bien!! Aunque en el viaje de vuelta había unos 6 bebés, empezó a llorar el primero y todos se animaron!! Mal de muchos, ya se sabe!

Os quedan vacaciones?? Pues... A VOLAR!!

:)

Cremita aquí, cremita allá... (I. Las cremas para el cambio de pañal)

Tenía pendiente hacer este post con los productos de higiene y cosmética para bebés que más me gustan y más uso con mi peloncete. Para los que no me conocéis, deciros que soy Técnico Superior en Estética y me especialicé por la UNED en Cosmetología y Dermofarmacia, así que, como comprenderéis, es un tema que me apasiona, y desde que tengo un hijo (incluso embarazada...) intento estudiar bien los productos que voy necesitando antes de decidirme. Como es muy amplio y existen infinidad de ellos, lo voy a dividir en diferentes post según categorías y de vez en cuando escribiré sobre estas cosillas, pero ante todo quiero aclarar desde aquí que estos post se basan en mis opiniones personales y que no tengo ninguna vinculación con ninguna marca, así que seré lo más objetiva posible desde mi experiencia.

Hoy voy a empezar con las Cremas para el Cambio de Pañal, que son productos que gastamos mucho, de hecho te indican en la mayoría de ellas que las apliques en cada cambio del bebé. Es muy importante que la zona esté bien seca, ya que a veces, después del uso de toallitas, se queda demasiado húmeda y puede escocerse o evitar que la crema cumpla su función de forma correcta.
Ahora bien, después del uso de varias cremas os cuento mi experiencia: Hay diferentes texturas, unas que son muy espesas (se suelen denominar pastas al agua) y otras mucho más ligeras que son bálsamos. La concentración que tengan de Óxido de Zinc os puede indicar un poco la textura, ya que es el principio activo responsable de proteger y aislar la piel del bebé de la irritación que produce el roce del pañal, la orina, las heces... Si la proporción de Óxido de Zinc es alta, suelen ser cremas para un uso más puntual, en caso de irritaciones. A menor proporción suelen ser más ligeras, en éstas últimas suelen recomendar que se aplique una capa más abundante, ya que así se aseguran mejorar la protección y el efecto barrera del producto.
Os voy a explicar una a una las cremas que yo he probado y luego os señalaré alguna otra que pueda interesaos.

La crema bálsamo de Mustela es la que uso a diario desde que observamos que las pastas al agua acabaron secando en exceso la piel del peque. Es una crema muy ligera para ser de cambio de pañal, se extiende muy bien, por lo que no gastas mucha para cubrir bien toda la zona, se limpia muy bien y, lo mejor, es que es muy nutritiva, lleva manteca de karité, y vitamina B5 y F, para calmar y reparar la piel. Además tiene ese olor tan característico de casi todos los productos de Mustela que tanto me gusta.

El spray Wickel lo compré por pura curiosidad, lo descubrí leyendo una revista de bebés y un día lo vi expuesto en la farmacia y decidí probarlo. Tiene una textura muy innovadora, es fluido y por lo tanto no resulta nada oclusivo para el culito del bebé. Lo mejor del producto, que al ser un spray te indican que tienes que hacer dos o tres dosificaciones hasta que cubras la zona, pero no tienes que extenderlo con la mano, así que a mi me resulta ideal para la bolsa de paseo, para hacer los cambios fuera de casa mucho más higiénicos. Lleva óxido de zinc como todas y también pantenol (o pro vitamina B5) que es un excelente hidratante regenerador y antiinflamatorio.

La pasta al agua Eryplast de Lusine la estuve usando durante más de un mes como crema exclusiva, pero desde mi experiencia, me parece una crema para intercalar o aplicar en periodos en los que el culito esté algo irritado. Tiene una textura espesa como bien indica su nombre y cumple perfectamente su función protectora, pero en mi caso su textura resecó en exceso la piel de mi niño. Lleva Óxido de Zinc, Pantenol, Glicerina (humectante) y Ácido Fítico, que mitiga la irritación neutralizando las enzimas presentes en las heces y la orina responsables de ésta. Para limpiar los restos de la crema entre cambios, os recomiendo usar una gasita humedecida en agua tibia, el calor hace que sea más sencillo que con las toallitas húmedas y no dañaremos la piel del bebé.
Aunque no la use a diario ya, siempre la tengo, tanto en el cambiador como en la bolsa de paseo, para dichas ocasiones.

Johnson's baby tiene dos cremas para el cambio de pañal.
La crema de la foto es la crema regeneradora (tubo azul), que ayuda a calmar y regenerar la piel del bebé cuando aparecen irritaciones (leves o moderadas). Tiene una textura mucho más ligera que las pastas al agua y como principio activo principal lleva Pantenol, como veis muy recurrente en este tipo de productos por los beneficios que os he explicado antes.
La otra crema que os digo es la crema protectora de pañal (tubo blanco), que, aplicada regularmente, ayuda a reducir al mínimo las posibilidades de irritación. Por lo tanto es de uso diario.
Para mi gusto, las dos me resultan demasiado ligeras, quizá cuando las aplicas no lo notas, pero cuando llegas al siguiente cambio de pañal, la crema se ha absorbido por completo y me da la sensación de que el efecto protector y barrera, tan importante en este caso, no lo cumplen igual.
A su favor está el precio, mucho más ajustado que los anteriores.

Por ultimo quiero hacer mención a dos productos de la marca Isdin que no he probado, porque por suerte mi hijo nunca ha tenido ni siquiera el culito irritado, pero para enrojecimiento moderado o infecciones por hongos pueden resultaros útiles y quiero compartir mi información, por si os interesan o ya los conocéis y queréis contarme qué tal os fueron:

 Nutraisdin ZN 40, es una pomada reparadora que mejora la piel del bebé en episodios de irritación y escoceduras producidas por el pañal y la humedad. Por lo que sé, es la que mayor concentración de Óxido de Zinc (40%) tiene en el mercado y aísla la piel protegiéndola de microorganismos que pueden complicar la piel dañada.

Nutraisdin AF, es una pomada reparadora con miconazol. Las iniciales AF indican que es antifúngico, es decir, trata las dermatitis del pañal que se complican y se infectan por hongos. Esta pomada lleva la cantidad mínima necesaria de fungicida para combatirlos y debe usarse durante 7 días. Si transcurrido ese tiempo no mejoran las lesiones te indican que se debe consultar con el médico.




Espero que os haya resultado útil el post, ahora... A cambiar pañales ;)

Mis mieditis

Cuando estaba embarazada y pensaba en ello, había dos cosas que me daban un poco de reparo tener que hacérselas al bebé: cortarle las uñas y curarle el ombliguito...
Una vez con el niño me di cuenta de que lo de las uñas no era para tanto, pero el ombligo me seguía dando la misma grima o más.
En estos dos temas ni los pediatras se pondrán de acuerdo, segun el que os toque os dirá una cosa, pero vamos por partes:
Mi hijo ya nació con las uñas de las manos larguitas y con un arte para arañarse magnífico! Además las uñitas de los bebés son muy finitas y en una carita de terciopelo como las suyas hacen verdaderas masacres...
Muchos pediatras defienden la teoría de que hay que esperar una o dos semanas para cortarlas, yo por suerte di con una que me dijo que cuando quisiera, eso sí, me dijo que la primera vez podía limárselas con una lima pequeñita y que estuviera un poco gastada. Eso hice y la verdad es que genial! Lo mejor es aprovechar sus ratitos de sueño, que es bastante fácil, porque las primeras semanas se las pasan durmiendo... Las siguientes veces ya hemos ido usando tijeras (especiales para las uñas del bebé, son pequeñitas y con punta redondeada, para evitar accidentes), el cortaúñas nunca lo he probado, pero me parece menos preciso, aunque eso es cuestión de gustos y de apañarse. Poco a poco esta rutina se la he ido regalando al Papá con la "L", que aprovecha cuando se me queda dormido al pecho y lo hace requetebién ( le tengo que dar un poco de coba desde aquí para que siga así de hacendoso ;P), además que ve bastante mejor que yo de cerca y eso es un plus!

Veréis que las uñas de las manos crecen que da gloria... Sin embargo las de los pies no! Mi peque está rozando los 4 meses y no se las hemos tenido que cortar todavía ni una sola vez. Se lo consulté hace poco al pediatra, porque me resultaba raro y me dijo que solía pasar, así que debe ser común :)

Ahora vamos con el cordón umbilical... Lo primero importante es que no puedes sumergir al niño en el baño por completo hasta que no se les ha caído y está curado el ombligo, creo que es para que no se reblandezca y para evitar infecciones, aunque el otro día leyendo una revista me di cuenta que hasta para esto hay división de opiniones.
Primero por sí no lo sabéis os describo un poco lo que os vais a encontrar; de lo que será el ombligo del bebé sale el trocito de cordón umbilical que le han dejado tras el corte y en el extremo les ponen una pincita nada más cortarlo.
El cordón al principio es más jugoso y clarito y a medida que van pasando los días y las curas se va oscureciendo y secando, hasta que un día... TACHÁN!! Te lo encuentras pegado en el pañal cuando vas a cambiarle! Normalmente tarda 10-15 días, aunque a algunos bebés, como el mío, se les cae antes, en concreto el 5º día (mi niño me lo puso fácil hasta en eso, jejejeje)
A nosotros en el hospital nos enseñaron a curárselo con alcohol de 70º, coges una gasa impregnada con un poquito de alcohol, rodeas el cordón con varias vueltitas y listo. Le pones el pañal e intentas que quede todo cubierto para que no se enganche ni le roce con nada, aunque sin apretar demasiado el pañal para que pueda 'respirar', no se macere y se seque antes.
Es bastante aparatoso sobre todo sí vas con miedo como yo, pero por lo visto no les duele nada, que es lo primero que intenté yo grabarme a fuego en mi cabecita para temblar menos... Jijijijijij
Cuando se le cayó, como tardó muy pocos días, se le quedó el ombliguito un poco rosado, sin terminar de curar, y el pediatra nos recomendó ponerle una vez al día cristalmina y mantener limpio y seco.
La verdad es que al pelón le ha quedado muy bonito, así que no lo debimos hacer demasiado mal ;)
Ah! Y no os asustéis sí se le sale algún día para afuera, suele pasar de llorar o de algún berrinche gordo, del esfuerzo, pero luego vuelve a estar para dentro normal...
Todo esto que os cuento es como nos dijeron a nosotros que debíamos curarlo, pero obviamente debéis seguir las indicaciones de vuestro pediatra, que sabe infinitamente más que yo de esto. Y ante cualquier signo de infección ( mal olor, inflamación, supuración, enrojecimiento...) acudid al médico,
Y un último consejo, guardad la pincita del ombligo junto a las pulseras de hospitalización vuestra y del bebé, el gorrito que le ponen nada más nacer, etc... Son recuerdos preciosos!

La hora del baño

El baño del recién nacido requiere técnica, práctica, maña y tranquilidad... Como para unos padres primerizos como nosotros suele resultar complicado, en el hospital tienen la deferencia de bañarlo contigo el primer día para enseñarte a hacerlo bien. En ese primer baño ya nos dimos cuenta de que gustarle, gustarle no le gustaba demasiado... Más bien nada!!! De hecho a mi niño recién nacido no le gustaba estar desnudo, se le notaba asustado, desprotegido... Luego se pasó, ahora no hay nada con lo que disfrute más que con los webs al aire ;)
Cuando llegamos a casa y le bañamos la primera vez la verdad es q no lo disfrutamos ninguno, el peque berreando como un poseso, yo nerviosa perdida intentando agarrarle bien y que no se me resbalara... Mi marido salpicado y con la cámara en la mano... Os podéis imaginar que para enmarcar las fotos no eran...
No sé vuestros niños, pero el nuestro por lo menos hasta el mes y medio no empezó a disfrutar del baño. Ahora le encanta y cada vez se lo alargamos un poquito más porque le relaja muchísimo!
Mi madre le regaló una tortuguita que se puede meter en la bañera y suena, y la verdad es que le encanta! Es un juguete que hemos dejado en exclusiva para la bañera y creo que ha sido un acierto, porque nada más verla ya empieza a reírse y ya sabe que toca baño!
Más adelante prepararé un post con los geles, cremitas, que he ido descubriendo y más me gustan, por si puede ayudaros en algo...
Ah!! Y una recomendación para las mamis más viajeras (o para las casas pequeñas), la Flexibath!! http://www.flexibath.co.uk/ Resulta muy útil y no ocupa nada de espacio! :)

Bienvenido a casa!

El día que nos dieron el alta en el hospital preparamos 'el petate' cogimos al niño y... A volar!!! Los largos pasillos del hospital, el ascensor, las escaleras mecánicas, las puertas giratorias... Quién nos había preparado esa gincana?? Parece mentira lo torpe que te sientes con el pelón en brazos! Era la una del medio día y en Madrid 40 grados a la sombra... Bueno, sombra, sombra no había, así que yo llegué hasta al coche con los andares de recién parida y con la ridícula certeza de que los malabares que estaba haciendo con una mano para proteger al niño del solazo servían de algo...
Cuando llegamos al coche había que comprobar que el Maxicosi molón que nos había prestado mi prima (gracias rubia!) funcionaba a la perfección y si los Papás con la "L" éramos capaces de: Meter al niño en el coche, sujetarle bien la cabecita sin descoyuntarle y abrochar el cacharro a la primera... No se nos dio mal, ya lo teníamos y fue entonces cuando descubrimos algo: Todo lo que llevaba semanas rodeándonos, todas esas cositas tan pequeñas que te hacen sonreír nada más verlas, a nuestro niño le quedaban grandes. En el maxicosi se perdía! Así que el camino a casa me lo pasé sujetándole y acordándome del tío que me hizo la episiotomía...
Cuando llegas a casa es una sensacion rara, parece que las paredes de tu barrio fueran testigos del momentazo que estás a punto de vivir... Hace tres días salía por la puerta una parejita y ahora entra una familia! No hace falta decir mucho para imaginar cómo estábamos...
Ahora voy a lo práctico... Os quiero dar algunos consejillos que a mi me sirvieron.
Los primeros días después del parto estás muy molesta y eso se junta con el principio de la lactancia, que es muy duro. La lactancia es a demanda, eso en un recién nacido implica tener la teta más tiempo fuera que dentro... Así que los días se pasan sin poder hacer mucho más que eso.
A mi me fue muy bien dejar tuppers de comida congelados, que fuimos sacando cada día sin ensuciar ni complicarnos.
Otra cosa importante es que los que te rodean sepan detectar los puntos de ayuda, me explico... A mi no me apetecía que nadie viniera a ayudarme con el niño, yo necesitaba esos días para acoplarnos los tres y conocernos mutuamente. Quizá soy demasiado independiente, eso va en gustos y desde luego no quiero imponer desde aquí mi criterio a nadie, pero para mi era primordial que el papá y yo comenzáramos el camino solitos y adaptarnos así a lo que sería nuestro día a día. Nos fue muy bien para repartir genial las tareas y los roles desde el principio y sobre todo con mucha calma, a nuestro ritmo. Mis padres entendieron lo que les pedí y cuando venían a ver a su nieto buscaban ayudarnos haciéndonos la compra, trayéndonos la cena, llevándose ropa para lavar... Cosas que agradeces en el alma cuando no tienes tiempo de nada!
Algo que me ha facilitado mucho la vida es la cuna de colecho. Cuando al principio te despiertas cada dos horas por la noche para dar el pecho agradeces en alguna toma no tener ni que levantarte para coger al niño, simplemente te lo acercas y los dos seguís durmiendo a las mil maravillas... (Aprovecho para decir a las que empezáis que hay luz al final del túnel y sin darte cuenta un día tu hijo empieza a dormir 6 o 7horas seguidas)
Otra cosa primordial para mi es una hamaca o trona adaptable que pueda usarse desde el nacimiento. Yo aprovechaba para llevármela al baño y dejarle ahí mientras me duchaba y al verle me quedaba mucho más tranquila y me tomaba la duchita con más calma...
El tema de las salidas de casa, nosotros empezamos a pasear con él desde el primer día. De hecho le pregunté a la pediatra y me dijo "Tú te lo quieres llevar a tu casa, no? Pues entonces a la calle a partir de hoy!" Simplemente hay que elegir bien las horas, según si hace frío o calor, prepararlo bien y punto. Obviamente si un día están cayendo chuzos de punta y hace un ventarrón inhumano te quedas en casa, aunque también están los centros comerciales... Paseas y te vas de tiendas! A mi me ha ido bien acostumbrarle a las salidas desde el principio para normalizar también nuestra vida y seguir pudiendo hacer casi todas las cosas que hacíamos antes.
Eso sí, seamos realistas, todos los bebés lloran, berrean, tienen días buenos y días peores! Así que está claro que no siempre los planes te saldrán redondos, habrá días que comas en tu restaurante favorito haciendo manitas con tu maridín mientras los dos babeáis mirando a vuestro niño dormir... Y otros días te quedarás comiendo sólo un rato mientras el otro pasea a "la criaturita" que llora como si no hubiera mañana! Y en esos días hay que respirar y pensar que es lo más normal del mundo... Aunque yo reconozco que sentía todas las miradas fijas en mí hasta que el niño se callaba! Vamos los estreses típicos de madre primeriza, imagino! Pero eso mejor ya os lo cuento otro día...

En el hospital. Informacion... ¿útil?

- La Bolsa de maternidad
Recuerdo en mis últimas semanas de embarazo un embotamiento continuo de cabeza... Un no saber si lo tenía todo listo porque no lograba visualizar qué es lo que realmente nos haría falta, si todas esas cositas tan chulas que tenía realmente le servirían al bebé para algo...
Pues bien, vamos por partes...
Es importante que solicitéis a vuestro ginecólogo o matrona una lista de las cosas que tenéis que llevar, que varía según el hospital. Tenedla muy en cuenta a la hora de preparar tanto la bolsa del bebé como la vuestra.
Yo me volví loca a meter y llevé un montón de ropita para el peque que casi no usé. Mi hijo nació en agosto, en plena ola de calor... Según subimos a la habitación nos pidieron un body, un pijamita de manga larga, gorrito y guantes. Hacía bastante calor, pero por lo que nos explicaron, los bebés necesitan mantener la temperatura y al principio no la regulan bien... Pero a partir del segundo día nos hacían tener al pequeño sólo con un body o incluso en pañales! Así qué nada de los conjuntitos monos que había estado seleccionando con tanto mimo... Además, dos veces al día pasaban en el hospital a tomarnos la temperatura a mi y al bebé, y en cuanto estaba un poco subidita... Body fuera!!
Eso sí, imprescindible un arrullo, por sí hay que sacarle de la habitación, por las corrientes de aire de los pasillos, varios gorritos y varios guantes, que se caen y se ensucian muchísimo del roce... Y como buena 'nueva mamá' sentirás una extraña sensación de histerismo-aprehensión para que nada que pueda estar sucio roce al pequeñín.
También me resultaron muy útiles unas gasas de algodón grandes, que cubrían totalmente al bebé (las compré en Carrefour en la sección de puericultura, por sí os interesa), para taparle por las noches y especialmente yo las usé para que las visitas que venían a verle se las pusieran sobre su ropa antes de cogerle. Parece exagerado, pero os cuento:
Algunos bebés, como le pasó al mío, presentan a las horas de nacer unas ronchitas o habones rojos que denominan "eritema tóxico del recién nacido" y es por la exposición a telas, productos químicos, etc, a los que todavía no están preparados... Es muy llamativo y alarmante, pero he de decir que el mío fue salir del hospital y desaparecer por completo, yo lo achaco incluso a los desinfectantes que usan en la ropa de los hospitales (como es lógico), fue llegar a casa con sus sabanitas lavadas con detergente para bebés et... Voila!! Piel perfecta!

- El papeleo
No olvidéis meter en el último momento la carpeta con todo el seguimiento del embarazo y las pruebas que os hayan hecho. Normalmente a la hora de dar a luz hay que tener muy a mano la última analítica, el electrocardiograma que te hacen en la preanestesia (o el apto del anestesista) y la prueba del streptococo. También te preguntan, o por lo menos a mi lo hicieron, por el peso aproximado del bebé en la última ecografia.

- Cositas que nadie me contó...
Cuando el niño nace, en sus primeras 24 horas de vida, controlan el primer pipí y la primera caquita (llamada meconio). El primer pis del bebé suele ser muy concentrado y escaso, debido a la reducida ingesta de líquidos de las primeras horas de vida (a la mamá puede que todavía ni le haya subido bien la leche como fue mi caso) y a unos padres primerizos quizá les pase desapercibida o lo que nos ocurrió a nosotros; detectamos una manchita anaranjada, pequeñita, en la parte superior del pañal y le preguntamos a una enfermera si eso era el pipí o era que se había manchado por la cercanía del cordón umbilical. Nos debió tocar una suplente o algo porque no supo contestarnos y nos dijo que algunos de esos pañales (que proporciona el hospital) estaban defectuosos y de ahí la manchita... Después al hablarlo con la pediatra nos dijo que efectivamente eso era el primer pipí y que el color teja era debido a los uratos, unos sedimentos que se forman en la orina debido a esa concentración y que incluso a veces hay papás que llegan a confundir con sangre por su color, pero son totalmente normales.

Otra cosita que me llevó de cabeza fue la subida de la leche, yo no me notaba gran cosa en los pechos, sólo alguna gotita que otra... Y mi pequeño no hacía más que succionar y succionar, pero mi sensación era que salía poco o nada y no me equivocaba... Debido a unas décimas de fiebre que me subieron por la epidural en el parto, a mi niño le hicieron una analítica para ver que todo estaba bien y por suerte así era, pero vieron que el azúcar lo tenía bajito y eso era debido, por lo que me explicaron, a que no estaba tomando alimento suficiente. Así qué decidieron darme un minibiberoncito de leche de fórmula ya preparada que a mi me sentó como un puñal en la espalda... Llevaba la mitad del embarazo leyendo sobre lactancia para intentar prepararme y no me dejaron casi ni empezar, la pediatra que me informó en vez de decirme que la tardanza en la subida de la leche es lo más normal del mundo, más o menos me dio a entender que ser madre no era sólo dar el pecho a mi hijo y que podría hacer otras muchas cosas por él... Que ella no le había dado el pecho a su hijo y que no pasaba nada... Ah! Y que si yo acaso recordaba si mi madre me había dado el pecho o biberones...!
Os podéis imaginar, con el cocktail de hormonas, como me sentía... En fin, al llegar a casa ya me subió la leche a la perfección y además pedí ayuda a una asesora de lactancia, pediatra, que no podía entender lo que le contaba, aún trabajando en el mismo hospital que la otra doctora.
Si a alguna os hace falta alguna ayuda de leche de fórmula al principio, yo os recomiendo que pidáis que no os den biberones, sino unas cucharillas especiales o jeringas, que evitarán la confusión del bebé entre la succión del pezón y la tetina del biberón, que a veces produce rechazo. No fue mi caso, por suerte, pero conozco algún caso. Aún así, para periodos de lactancia mixta, recomiendo usar biberones que imiten la forma del pezón materno. A mi me han ido muy bien los de Tomme Tippee Closer to Nature, os los recomiendo. También sé que funciona genial el biberón Calma de Medela, pero tengo entendido que sólo sirve para leche materna, no de fórmula.
Si no lo habéis hecho ya, leed el libro del pediatra Carlos González, "Un Regalo para Toda la Vida". Solucionará todas vuestras dudas sobre lactancia.

Los puntitos de la episiotomía... Yo sólo tuve tres, pero qué tres!! La verdad es que el primer día que te duchas después del parto y te dicen que te laves la zona con agua y jabón y te tocas... Uffff... Da bastante sensación no reconocerte al tacto 'por ahí abajo' ;P
Pero todo vuelve a su ser... Aunque te acuerdas del que te hizo la episio unas semanitas! Yo aconsejo lavar con un jabón que no sea muy hidratante, y secar muy bien, tamponando, no frotando. Como de por sí es una zona húmeda, podéis usar el secador alguna vez, pero sin abusar de él y extremar la higiene cuando vayas al baño.

Las hemorroides... Los empujones no pasan en balde, y suelen dejarte algún regalito por la puerta de atrás, y si has tenido problemas de estreñimiento en el embarazo todavía más. Aquí hay poco que hacer. Eso sí, durante el embarazo coméntaselo a tu ginecólogo y las cosillas que todas sabemos y que tan poco nos gusta que nos digan: bebe mucha agua, toma mucha fibra, tralará, tralará, tralará.... :)

Y por último y más importante, el descanso... DUERME!! Es algo que me decía todo el mundo y yo pensaba "Cómo se puede descansar bien con ésta barriga??" Pues después te acuerdas de lo bien que dormías antes, con barriga y todo... Ya nunca más dormirás a pierna suelta! Siento ser agorera, pero tu mente cambia, se pone alerta 24 horas... Eres 'la guardiana' de un pequeño gnomito y estarás pendiente de él hasta para ver cómo respira las primeras noches. Haced caso a esta bloggera, cualquier momento es bueno para echar una cabezadita, lo agradeceréis. Así qué dejo de escribir a la voz de ya, para que podáis poneros a ello... ZzzzzzZZzzzzZZzzzzz :)

El día que cambio mi vida

Tras 37 semanas de maravilloso embarazo y en plena ola de calor sahariano... Llegó el gran día!
Me levanté a las 7 de la mañana, después de dormir bastante regular como ya venía siendo habitual ( la súper barriga y los continuos 'pipís' no ayudaban...), con contracciones suaves e irregulares (cada 12 minutos, cada 5, cada 20...). Para mi el dolor era bastante soportable, así que no le di importancia, de hecho si me hubiera tenido que guiar sólo por mis contracciones creo que hubiera acabado pariendo en casa... ;P
Me puse a trastear por casa y a las once de la mañana me volvió a entrar un sueño irrefrenable y conseguí dormir hasta las dos. Me desperté para hacer la comida, puse la olla exprés, un guisito rápido y cuando me levanté a retirarla del fuego... TACHÁN!!! Rompí aguas! Charcazo en la cocina! Yo medio llorando de la emoción me puse a gritárselo a mi marido, que ya había visto 'la jugada' desde el salón.
Claras y limpias! Todo en orden, según la preparación al parto, así que como ya tenía todo listo y requetepreparado, me dediqué a ponerme a punto; me duché, me planché el pelo y lista! Cogimos los bártulos, mi bolsa y la del niño, y tiramos para el hospital.
Mi marido es tranquilo, creo que le he visto perder los papeles una vez o ninguna... Y esta vez no iba a ser menos! Ahí iba yo, resoplando sentada sobre un empapador desechable de los del niño y él conduciendo como cuando vamos al Súper a llenar la nevera...
Llegamos al hospital y me llevaron a la sala de dilatación dejando un reguero de líquido amniótico para que pudiera seguirnos mi marido... Todo fue muy rápido, llegue dilatada de 2 cm y en unas horitas estaba completa, con la epidural muy tranquila, aunque notaba perfectamente las contracciones, que es lo que yo quería. El parto fue mejor que en mis mejores sueños, 'tres' empujones (que cuestan sudores y agujetas los días siguientes, de agarrarte y hacer fuerza con los brazos...) y nació mi ángel, un niño precioso y sano como una manzanita... Según me lo sacaron, me lo pusieron sobre mi pecho desnudo y allí le limpiaron y le hicieron todo, todito! Qué increíble, cómo abría mi niño sus ojitos intentando distinguir algo... Mi marido, que estuvo todo el rato en el parto, y yo, no parábamos de hablarle, tocarle, besarle, era tan bonito y tan pequeño y lo habíamos hecho nosotros...! No se me olvidará nunca lo bien que olía y lo calentito que estaba... :)
Sobre el pecho empezó a buscar y él solito se enganchó a su teta y listo! Parece mentira lo que es el instinto... Y cómo en muchos hospitales lo bloquean desnaturalizando el parto y la lactancia por completo.
Ese fue el primer día de nuestra nueva vida...

Aprendiendo a ser Mamá...

Me llamo Esther, soy una madrileña de 31 años y hace poco más de tres meses y medio me he convertido en mamá y en la mujer más feliz del mundo!
Mi niño me está dando los mejores momentos de mi vida y yo quiero devolverle tanto y tanto, que aquí me tenéis... Con una "L" a la espalda, aprendiendo lo más rápido que puedo! Me encantaría compartir, con tod@ el que quiera leerme, el día a día de mi nueva vida!
Vuestros comentarios serán bienvenidos... Y ojalá mis experiencias puedan servir de algo a nuevas mamis o papis!
Muchísimas gracias por leerme!